ESCULTURA “TORRE PRINCESA”, SAN FERNANDO. #DiariadeCádiz 2022.12.11

 

ESCULTURA “TORRE PRINCESA”, SAN FERNANDO.  #DiariadeCádiz 2022.12.11

Un recorrido por la escultura “Torre Princesa”, un breve análisis de este hito urbano de San Fernando, en un hilo de tweets publicado con el hashtag #DiariadeCádiz el pasado 11 de diciembre. Una obra poco conocida, menos comprendida y peor ubicada.

2022.12.11   TORRE PRINCESA, SAN FERNANDO

#DiariadeCádiz La escultura “Torre Princesa” está situada actualmente en la rotonda de la avenida de la Constitución, en su confluencia con las calles Escritor Luis Berenguer y José Ramos Borrero, formó parte de las esculturas expuestas en la Plaza de las Esculturas desde 2007.  

Es obra del prolífico escultor Antonio Aparicio Mota (San Fernando 1966). Licenciado en Bellas Artes (especialidad escultura) (1989) y en Conservación y Restauración (1992) por la Universidad de Sevilla, profesor de escultura en la Escuela de Bellas Artes de Jerez.

Es también Académico Numerario en la Academia de Bellas Artes de Cádiz desde 2007. “Torre Princesa” es la 3ª de sus obras de estatuaría pública presente en la ciudad de San Fernando, además de “Camarón” (1993, Plaza de Juan Vargas) y de “El Marisquero” (2003, Plaza del Rey).

Antonio Mota, ha trabajado diversos géneros escultóricos, diferentes estilos y variados materiales. Con “Torre Princesa” abandona el realismo y se adentra en el expresionismo, deja a un lado cánones clásicos, el equilibrio y la armonía expresiva.

Torre Princesa, es un arrebato de amor y deseo, inspirado en él poema de Mari Pau Domínguez “Dame tu boca”, las figuras se arremolinan transmitiendo la fuerza de esos versos “…Resbálate por mi /contorno, /cómete mis besos/envueltos en mis brazos;  /y valdrá la pena existir…”

“Lamo las aristas /de tu deseo inquietante…” Realizada en resina con una carga de polvo de piedra, sobre una estructura de fibra de vidrio, mide 180 cm de alta x 70 cm máxima en su base irregular, apoyada directamente sobre una base circular de cemento.

Cuatro figuras desnudas componen la obra (2 mujeres y 2 hombres) que se retuercen en pleno éxtasis, mezclando sus cuerpos orientados hacia lugares diversos. Unidas fuertemente por sus manos, de largos dedos, se agarran unas a otras. Los espacios vacíos generan un fuerte dinamismo.

Las figuras parecen inacabadas, no solo por su textura rugosa, así la mujer situada en la parte alta, mira al cielo y muestra su cabeza incompleta, sin pelo. La escultura no tiene una direccionalidad clara, no se concibió para ser observada tan lejos, en una rotonda sin acceso

La escultura demanda, más que otras, por el material utilizado, su mantenimiento y cuidado, hay partes de su superficie que se han desprendido. Además de su inadecuada ubicación carece de una cartela explicativa que permita comprenderla, valorarla y hacerla significativa.

 

Copyright Manuel Holgado García 2022.12.22