EL MONASTERIO DE LA SANTÍSIMA TRINIDAD, c/REAL Nº224, SAN FERNANDO, CÁDIZ

EL MONASTERIO DE LA SANTÍSIMA TRINIDAD, c/REAL Nº224, SAN FERNANDO, CÁDIZ

#DiariadeCádiz del 19 al 25/02/2024.

Os dejo un breve recorrido histórico y artístico por el edificio del monasterio de las Santísima Trinidad, de las Carmelitas Descalzas, una casa del XVIII situada a las afueras de las Isla que se adaptó al uso conventual a mitad del S. XX.

Los textos son básicamente la compilación de los hilos de tweets publicados con el hashtag #DiariadeCádiz, entre el 19 y el 25 de enero de 2024.

#DiariadeCádiz La finca nº224 de la C/Real, es sede del Monasterio de Clausura de la Santísima Trinidad, de las Carmelitas Descalzas, erigido canónicamente el 15/10/1946. Conocida como “La Casa de la Torre” perteneció a D. Andrés Rodríguez Peralta que la vendió en 200000 pesetas.

Con escasas y breves reformas se adaptó al uso conventual (capilla, claustro, dependencias monacales, jardín, huerto y cementerio), manteniendo la esencia y los elementos propios de las construcciones domesticas de la zona, que datan en este caso del último tercio del XVIII.

El monasterio de tiene una sola planta en fachada, en el interior sobre el claustro presenta una planta superior y la torre mirador que constituye el tercer nivel en altura. La fachada es austera, su portada está centrada y dos ejes a cada lado.

La portada en la actualidad tiene la piedra ostionera vista, se enmarca por pilastras, toscanas sobre pedestal, entre ellas las jambas verticales de la chambrana se unen a las molduras con formas de volutas que parten del 2º capitel, sobre el dintel, formando una cruz latina.

La puerta es de madera y doble hoja adinteladas, sobre ellas, hay un fijo con remate de arco rebajado que deja en el centro el emblema de la orden. La austeridad es tal, que solo un pequeño azulejo reciente identifica el cenobio.

Los cuatro huecos laterales son cierros salientes apoyados sobre impostas y protegidos por rejas de forja, decoradas someramente con volutas en su centro, están cubiertos con techos de varias platabandas rematados con molduras de arcos conopiales ciegos.

Recorre toda la fachada del monasterio una saliente cornisa, que da paso al pretil liso de la azotea, que se ha elevado en un tramo, dejando embutidos los pilares cuadrangulares con cartelas insertadas en él y lisas.

Vista del Monasterio y la casa contigua. Fuente; Archivo Quijano

En sus bordes alternan las líneas rectas y curvas cóncavas en las esquinas, y que sostienen cinco almenas, sobre una base paralelepipédica de tres escalones, que se convierte en la peana sobre la que se apoya una copa con asas y tapa rematada con un adorno en forma de piña.

Las almenas están presentes en los tres niveles de altura del monasterio, en los que se mantiene la misma tipología de estas. La torre mirador es de planta rectangular es un elemento poco usual en la arquitectura civil de la ciudad.

También está presente en el convento de las Capuchinas, tiene seis almenas, sobre pilares que quedan unidos por una barandilla de forja. Los seis huecos con arcos de 1/2 punto del segundo cuerpo de la torre han sido cegados.

Un patio de planta cuadrada conforma el claustro monacal, con cuatro crujías austeras de paredes aplacadas con azulejos lisos y recientes conformando un alto zócalo, con vamos rectangulares adintelados sin decoración alguna.

Patio y claustro del Monasterio; fuente: https://guiadigital.iaph.es/sys/productos/ClausurasCadiz/sanFernando/trinidad/monasterioStaTrinidadConvento.html

Su pavimento en damero se delimita por ocho columnas toscanas sobre pedestal que sustentan arcos de ½ punto rebajados, en el centro un brocal octogonal, todos estos elementos son de mármol. Preside el patio una talla pétrea de San José y el Niño, sobre una columna exenta a media altura, de fuste acanalado y capitel corintio, situada delante una de las columnas del claustro.

Patio y claustro del Monasterio; fuente: Archivo Quijano

El patrimonio histórico e iconográfico del monasterio de la Santísima. Trinidad es muy sobrio, al tratarse de una fundación reciente y por el propio carácter carmelitano, sobresale la talla en madera policromada de Santa Teresa de Jesús obra de talleres artesanales.

Santa Teresa, fuente: Archivo Quijano

El monasterio en el momento de su fundación estaba a las afueras de la ciudad, casi aislado, hoy la expansión urbana en la zona lo ha rodeado de altos edificios, tiene el nivel 2 de protección integral, al ser considerado una edificación de interés arquitectónico y singular.