EL HOSPITAL DE SAN JOSÉ DE SAN FERNANDO. #DiariadeCádiz del 7 al 12.07.2023.

EL HOSPITAL DE SAN JOSÉ DE SAN FERNANDO. #DiariadeCádiz del 7 al 12.07.2023.

El hospital de San José de San Fernando es un edificio construido en el último tercio del siglo XVIII; originariamente como hospital de caridad y que ha tenido diversos usos a lo largo de estos más de dos siglos.

Realizo a continuación un breve análisis el edificio, lamentablemente no se puede acceder a su interior, desde su cierre como centro educativo de Enseñanza Secundaria, Bachillerato y Formación Profesional, en el verano de 2021, siendo solo accesible la iglesia.

Incluyo una referencia al retablo cerámico de la Virgen de las Mercedes y a la escultura de San José ubicados en las esquinas de acceso a la plaza homónima junto al hospital.

Los textos son la compilación de tweets publicados entre el 7 y el 12/7/2023, con el hashtag #DiariadeCádiz.

#DiariadeCádiz Su construcción comenzó en 12/1768, tras la autorización de Carlos III, para fundar un hospital y oratorio, para dar asistencia a los pobres de solemnidad y transeúntes, las obras finalizaron en 1770, impulsadas por Fray Tomás del Valle, obispo de Cádiz (1731-76).

En sus inicios ya fue utilizado para asistir a tropas del Ejército y de la Marina, contando con la colaboración de los médicos del Real Colegio de Cirugía de Cádiz, en el tercer 1/3 del S. XIX estuvo gestionado por el Patronato de San José, se mantuvo como hospital hasta 1956.

Sus dificultades económicas como hospital de caridad, provocarán el abandono de la función sanitaria en 1956. dedicándose a la acogida de ancianos en acuerdo con la Diputación Provincial hasta 2/1984. Entre 1989 y 2021, en sus espacios se ubicó la Escuela Técnica de San José.

Los planos del hospital de San José, se deben al arquitecto Torcuato Cayón de la Vega, el edificio de planta rectangular con 41,65 de ancho y 188,42 m de fondo, de estilo neoclásico, con salas de enfermos, una pequeña capilla y un gran patio también rectangular.

El patio del hospital tiene tres crujías abiertas (y una integrada en las construcciones posteriores), con cinco arcos de ½ punto apoyados en columnas toscanas sobre pedestal, en cada lado; los arcos lados mayores son más altos y más anchos; con un brocal marmóreo octogonal de pozo.

El edificio está construido en piedra ostionera; su fachada principal es de gran simetría, se divide en 11 tramos, flanqueados por pilastras; los tramos centrales conforman la portada, marcada por arcos de ½ punto, rebajados en los dos tramos del muro a los lados de la misma.

El hospital de S. José tiene dos plantas en su fachada principal, su portada centrada crea un espacio cuadrangular, cubierto con bóveda de arista encamonada y dos huecos altos rectangulares, protegido por una reja de forja; a la izquierda da acceso a la capilla.

Los huecos a los lados de la portada se apoyan sobre impostas (salvo el inferior izquierdo). Todos los vanos son adintelados y protegidos con rejas de forja; sobre ellos se alternan frontones triangulares y curvos, con tímpanos rehundidos apoyados sobre ménsulas con triglifos.

En la fachada lateral a la C/Tomás del Valle hay 11 huecos con la alternancia de frontones triangulares y curvos, apoyados sobre ménsulas decoradas con triglifos y gotas en el frente. Los 3 primeros tramos flanqueados por pilastras repiten el esquema de la fachada principal.

La fachada a c/ Tomás del Valle, el hospital de S. José en S. Fernando tiene una portada secundaria, adaptada al desnivel de la calle, adintelada flanqueada por pilastras toscanas con un estrecho entablamento y frontón triangular con el tímpano liso y rehundido.

El resto de huecos de la planta 1ª en la C/ Tomás del Valle, aparecen recercados con piedra ostionera pintada con almagra, resaltando sobre el blanco del muro revocado. La fachada fue restaurada en 2003 por la empresa “Momentun”, recuperando el color óxido de hierro original.

Una cornisa remata la fachada sobre la que se apoya el pretil de la azotea, decorada por 10 merlones sobre pilares cuadrangulares con contrafuertes mixtilíneos, rematados con un tronco de pirámide de lados curvos; encima 1 cono y 2 esferas cerámicos policromos, superpuestos.

Sobresale en la azotea del hospital de S. José, una espadaña con 2 arcos de ½ punto, escasamente decorada, salvo la cornisa escasamente saliente sobre la que se apoya el dintel. En una de sus campanas se conserva la salamanquesa grabada símbolo de su arquitecto.

En la esquina izquierda bajando la calle San José con la plaza homónima, hay una hornacina semicircular, sobre una movida imposta de varias platabandas, que se apoya en ménsulas cuadrangulares en los extremos y en un florón semicircular en el centro.

El nicho se flanquea con pilastras con doble capitel y fuste rehundido en dos tramos del tercio superior. En el interior su cubierta es casi plana, cruzando los nervios en el centro, marcando los lunetos y plementos; con cúpula semiesférica en el exterior rematada con una cruz.

En ella se ubicó la imagen de la Virgen del Carmen; en 2002 se colocó la imagen de S. José y el Niño Jesús, en barro cocido, obra de Alfonso Berraquero, muy movida y amplios pliegues en los ropajes, de dulce expresión y cabeza ligeramente inclinada casi apoyada sobre el Niño.

En la misma esquina se encuentra el retablo cerámico dedicado a Nuestra Señora de las Mercedes (Redentora de los cautivos), realizado en 2009 por Antonio Linares y Francisco Tenorio, en su alfar Cerámicas de Villamartín (Cádiz). Alargado y de contorno mixtilíneo.

Su iconografía, es idéntica a la de la talla de candelero del S XVIII venerada en la iglesia del Hospital de S. José. A sus pies dos angelotes portan cadenas y un ramo de azucenas; rodeada de roleos y veneras doradas, en el ático corona el retablo el blasón mercedario.

Son varios más los retablos cerámicos ubicados en la calle S. José, vinculados con las hermandades y devociones radicadas en la iglesia del Hospital, que actualmente es el único espacio en uso, desde 2021, los demás espacios están cerrados y en un proceso de ilógico deterioro.