CONVENTO DE NUESTRA SEÑORA DE LA PIEDAD, FACHADA, CADIZ

 

CONVENTO DE NUESTRA SEÑORA DE LA PIEDAD, FACHADA, CADIZ

#DiariadeCádiz del 27/6 al 3/7/2024

Este convento de clausura es conocido por la elaboración de exquisitos dulces, sin embargo, es un desconocido en su aspecto artístico.


En esta entrada hago un recorrido por sus fachadas, su situación en el centro urbano, rodeada del caserío histórico, a pesar de su austeridad (propia de un edificio religioso de clausura) son una extraordinaria muestra de arquitectura barroca.

Hago un breve recorrido por ellas, los textos son la compilación de hilos de post, publicados con el hastag #DiariadeCádiz entre el 27/6 y el 3/7/2024.

#DiariadeCádiz El convento de Nuestra Señora de la Piedad, con fachadas a las calles Montañés y Feduchi, pertenece a la orden de las Franciscanas Concepcionistas Descalzas. El permiso municipal para construir casa e iglesia es de 1664, la licencia real de Felipe IV es de 1647.

Su bula fundacional del Papado es de 1648 y sus obras habían concluido en 1660, inaugurado en 1668. La portada conventual en la c/ Feduchi, es de gran sobriedad, rectangular y adintelada, enmarcada por pilastras toscanas, decorada con círculos planos y pijante sobre el dintel.


El friso de la portada conventual de la Piedad, es liso, presenta en los extremos del arquitrabe triglifos y en el centro un hastial de lados curvos, sobre el friso una línea de imposta discontinua, proporciona cierta movilidad en consonancia con el barroco, en su planta baja la fachada es de piedra ostionera.


En el muro se abre una hornacina, sin imagen, de planta semicircular recercada por una chambrana de piedra ostionera vista, de perfil mixtilíneo y varias platabandas, tiene bóveda de horno y se remata con una cruz, en su base una ménsula semicircular avanza sobre la fachada.


La planta baja y 1º de la fachada a la c/ Feduchi, es de piedra ostionera vista, las plantas superiores se diferencian por líneas de imposta, todos los vanos están recercados (algunos convertidos en óculos y otros cegados) con algún balcón protegido por reja de forja.


En las plantas superiores hay pocos vanos, solo en la parte más alta, aislados y asimétricos. Hay una 2ª portada adintelada abierta en el muro posteriormente (en el extremo más cercano a la plaza del palillero), sobre ella en la planta superior aparece una banda semicircular saliente apoyada sobre impostas y rematada en pináculo.


La fachada a la c/ Montañés, tiene en su parte alta una galería de amplios vanos rectangulares, que iluminan el lado de la epístola de la iglesia conventual, enmarcados por fajas, elemento que se repite separando los tramos del templo.


Una línea de imposta los separa del paramento inferior, que se apoya en el espacio de los vanos y de las fajas, en pijantes de formas diversas, propias de la arquitectura local del XVIII. En la 2º planta diferenciada por imposta y anexa al templo, aparecen otros cuatro vanos.



La iglesia conventual tiene dos portadas, la de la iglesia situada en el primer tramo, tiene gran altura, es adintelada y recercada por una chambrana marmórea, rematada con volutas y pináculos en el dintel donde está grabado “ECLESSIA S M (anagrama mariano) SUBTITULO DE LA PIEDAD.


Sobre el dintel un arquitrabe flanqueado por pilastras toscanas, en el friso aparece grabada la leyenda ANNO (una corona en el centro) 1728, anterior a las reformas que el maestro Pedro Afanador, realizó en el convento, muy deteriorado por las humedades y que finalizó en 1759.


La portada de la sacristía, es mucho más barroca, de formas sinuosas y movidas, realizada en piedra ostionera, tiene dos cuerpos, el inferior se enmarcada por columnas pareadas de mármol, sobre pedestal, fuste liso y capiteles de moño.


Tras las columnas hay pilastras de piedra ostionera, que dan movilidad a la planta lineal de la portada, las columnas sostienen un trozo de arquitrabe, sobre él, una cornisa mixtilínea, de extremos horizontales y centro curvado, diferenciando el cuerpo superior de la portada.


La puerta tiene dos hojas desiguales, la parte alta se remata con un dintel en el centro y curvas en el extremo, en un ritmo inverso a la cornisa que tiene encima, dejando sobre la puerta un tímpano liso.


En el cuerpo superior de la portada, está enmarcado por una moldura curva cóncavo-convexa que, deja en su interior dos volutas pareadas y entre ellas un óculo elíptico recercado por un baquetón y sobre él un hueco rectangular rematado en ½ punto.


Una cornisa mixtilínea con los extremos rectos y el centro curvado, más estrecha que la inferior, sirve de soporte a un pináculo con bola que remata la portada. A los lados hay grandes ventanales rectangulares protegidos por rejas de forja, decoradas con Ss y Cs en el centro.

DOCUMENTACIÓN:

ALONSO de la SIERRA, J. y ALONSO de la SIERRA, L.; Iglesias de la diócesis de Cádiz y Ceuta, Obispado de Cádiz y Ceuta, 2021, Cádiz, pp. 162-167

 Copyright Manuel Holgado García, 2024.07.03

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